El
valor de la Presencia de Dios
Introducción
La
presencia de Dios es una fuente de vida inagotable, nunca se termina el fluir
de su presencia sobre nosotros.
Desarrollo
2 Samuel 6: 1-12
El
arca de Dios representaba la presencia de Dios.
¿Cómo
ha de venir la presencia de Dios a nuestras vidas? ¿Cómo hacemos para que la
presencia de Dios no solo nos toque o visite, sino que también se quede con
nosotros?
Este
es el problema de muchos reciben el toque de Dios en las reuniones pero durante
la semana viven en derrota, no hicieron que la presencia de Dios se quedara con
ellos.
David
amaba a Dios, y tenía toda la buena intención de traer el arca, tenía el deseo
pero eso no garantizaba que la presencia de Dios se quede.
¿Qué
es lo que garantiza que se quede la presencia de Dios con nosotros? La obediencia, que camines los pasos que
Dios te dice que tienes que caminar, que vivas en su voluntad esto garantiza
que la presencia de Dios no solo venga a tu vida sino que también se quede
contigo y que sea el mayor tesoro que tú tienes en tu vida y en tu casa.
v.3 “pusieron
el arca de Dios sobre un carro nuevo”. Los esfuerzos humanos no te garantizan
que la presencia de Dios venga donde tú quieras que este, la obediencia sí.
Entonces
David tiene la buena intención y traen el arca de la casa de Uza, 20 años
estuvo el arca allí. Venían caminando, los bueyes tropezaron y Uza quiso tocar el arca, para él era normal
el arca porque lo tuvo 20 años en su casa.
v.6-7
Pero Dios un día, le hizo entender a través de el a todos que su presencia no
es algo normal. No podemos hacer de ella algo rutinario porque eso puede traer
muerte espiritual para nuestras vidas.
Ahora
David, se pregunta ¿Qué paso aquí? Algo estaba mal. La intención era buena pero
el ¿cómo? no estaba bien, estaba mal. Porque el arca del pacto no tenía que ser
llevada en carro sino sobre el hombro por gente consagrada, llamada para llevar
el arca de la presencia de Dios.
Tú
eres unas de esas personas, Dios te llamo para poner sobre tus hombros su
presencia para que seas portador de esa presencia maravillosa de la gloria de
Dios en tu vida.
Tú
puedes tener la mejor intención de tener la presencia de Dios pero si a la
intención tú no le agregas la manera que es la obediencia como Dios quiere que
sea todo va a quedar en una mera intención y nada más.
Todos
quieren la presencia de Dios por lo que nos brinda pero nadie quiere la
presencia de Dios por lo que significa tenerla.
¿Le
das valor a la presencia de Dios? Mientras no entiendas el valor de su
presencia la vas a menospreciar. Muy pocos son los que saben del valor de su
presencia.
v.10-11 Después de lo
sucedido David decide dejar el arca del pacto en la casa de Obed-edom. Después
de lo que habían visto en aquel tiempo, que un hombre fue herido, quebrado por
Dios, ¿quién hubiese querido tener el arca del pacto en su casa? Tal vez para
algunos era un riesgo. En cambio, para Obed-edom en tiempos así, la presencia
de Dios no dejo de tener el valor que tenía que tener en su vida.
Algunos dicen “ay yo no, porque no creo poder responderle a Dios
como Él quiere que le responda”. Porque no entienden el valor de ella porque
solo se han acostumbrado a vivir de lo que
las manifestaciones hicieron en sus vidas.
Si tú le das valor a la presencia de Dios, tú te vas a rendir a El
completamente. Y su presencia hará en tu vida lo que no logras tú con tus
propias fuerzas.
v.12 Hay bendición por
causa de la presencia de Dios.
La presencia de Dios no es solo una experiencia espiritual sino que
también tiene trascendencia en nuestra vida y en todo los que nos rodea.
Por causa de su presencia vas a ser fructificado, vas a ser bendito,
vas a ser restaurado.
Después de que David trajo el arca de Dios, entro danzando a la
ciudad, Mical lo miro y lo menosprecio porque ella no entendía el valor de la
presencia de Dios. Ella después quedo estéril.
Así también, cuando hay gente que no entiende el valor de la presencia
de Dios, espiritualmente quedan estériles, se vuelven religiosos y no viven la
vida de la presencia de Dios.
2 Samuel 8: 1-6
David a donde iba derrotaba a los enemigos porque recupero la presencia
de Dios para su casa.
Cuando tú recuperas la presencia de Dios y vives sometido a la
presencia de Dios, tú siempre tendrás victoria sobre los enemigos.
Dale el valor que le tienes que dar a la presencia de Dios para que lo
que ocurrió con la casa de Obed-edom, también ocurra contigo hoy. Porque este
es un tiempo especial donde la misma presencia de Dios dará testimonio de lo
que ella hace en tu vida.
Recupera la presencia de Dios, vuelve a buscar su presencia.
Valora su presencia, ríndete a ella y deja que ella trabaje en tu
vida.
Pastor Carlos Ibarra
Ministerio Jesús es el Señor
Año 2014
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