El
propósito de Dios para tu vida
Introducción
Hay
un propósito de Dios que está por encima de la bendición.
Desarrollo
Romanos 8:28-38
La
salvación, la justificación, la vida eterna, todo esto lo recibimos gratis.
Todo esto lo hemos recibo cuando reconocimos al Señor Jesús. Porque fuimos
antes de la creación del mundo, fuimos predestinados por Dios para ser
llamados.
Fuimos
llamados a la salvación, que está en su hijo Jesús. La salvación tiene que ver
con ir al cielo, la comenzamos aquí pero el fin de esto es pasar el resto de la
eternidad en la nueva Jerusalén. Por eso, Jesús dijo “voy a ir al cielo a
preparar morada para Uds. Porque donde Yo estoy quiero que estén Uds. también”.
Tu
vida misma debe ser un mensaje para que todos sepan que eres cristiano.
Hay
veces que nuestra vida no concuerda con la palabra y tenemos que poner
calcomanías para que la gente sepa que somos cristianos.
Tienes
que entender que la gente tiene que ver en ti la palabra de Dios. Porque eres
la biblia que muchos van a leer en tu vida.
v.29 La biblia dice
que El antes ya nos conoció. ¿Dónde nos conoció? El antes de Dios es antes de
tu antes. ¿Cómo es esto? El antes de Dios es antes de todo antes humano porque
tu mente puede regresar al pasado y recordar momentos de tu niñez, de tu
juventud, pero al antes de Dios tenemos un límite y no podemos llegar.
Aquí
donde el Apóstol Pablo habla del antes de Dios, habla del antes donde todavía
no existía la materia prima ni el tiempo, donde solo era Dios antes de toda la
creación.
Hay
un momento antes de la creación, antes del Génesis 1 donde Dios te conoció.
En
el antes donde Él ya nos conoció, comenzó el plan de la salvación, nos
predestino para que fuésemos llamados un día por medio de Jesucristo a la
salvación eterna.
Predestinar
tiene que ver con determinar un destino antes de que ocurra.
v.30 La salvación te
salva, y la fe te justifica. Esto es gratis.
“Y
a los que justificó, también los glorificó”. Somos glorificados en el Espíritu.
Tu eres en el espíritu todo lo que el planeo que seas. Tú en el espíritu tienes
todo lo que dijo Dios que tienes que tener. Cuando seas levantado en los aires
vas a ser glorificado y no vas a ser glorificado más de lo que ahora ya eres en
el espíritu.
La
salvación no tiene que ver con una posición o un lugar futuro. Tiene que ver
con ser traído de regreso a una persona maravillosa llamada Jesucristo.
v.28 “los que han
sido llamados de acuerdo con su propósito”. Muchas veces hemos acomodado la
palabra propósito de acuerdo a nuestras necesidades. Sacamos la palabra
propósito de su sentido original.
El
propósito justifica nuestro llamado. Y si no entendemos el propósito tampoco
vamos a entender el llamado.
Fuimos
llamados por Dios por un propósito. ¿Cuál es el propósito?
v.29 “para que fuesen
hechos conformes a la imagen de su Hijo”… que seamos semejantes a su Hijo, para
que el sea el primogénito y no tu. El propósito es que tú seas conformado a la
imagen de Jesucristo por encima de toda bendición.
Dios
te llamo para que seas conformado. Conformar
es formar de acuerdo al molde. Para eso Dios nos llamo, para meternos en el
molde y nuestra vida tome la forma de Jesucristo que está por encima de
cualquier bendición y prosperidad.
La
salvación y la justificación no nos cuestan nada porque es gratis, es por fe y
por gracia de Dios. Pero la formación para llegar a la imagen de Jesucristo te
va a costar todo. Y no todos están dispuestos.
Pero
el que entiende cual es el propósito de Dios no tendrá más problema con las
demás cosas porque va a entender que Dios está trabajando y que todas las cosas
ayudan para bien para que se cumpla ese propósito en tu vida.
Romanos 8:16-18 Aquí vemos dos
cosas, dos elementos que el Padre va a utilizar para formar en ti la imagen de
Jesucristo que es el propósito: padecimientos y aflicciones.
Dios
te va a dar una nueva identidad, te va a formar de acuerdo a su cultura de
reino y su cultura de reino dice que tú tienes que parecerte a Jesucristo
porque ese es el propósito de Dios para tu vida.
Dios
va usar lo que menos te imaginas para formar tu vida. Dios va a tratar de Dos
maneras de afuera y de adentro.
De
adentro, Jesús viene a tu vida, como en el pentecostés el Espíritu Santo estaba
sobre ellos y adentro de ellos. Cuando Cristo viene a tu vida y la vida de
Cristo empieza a crecer dentro de ti, tu vida cambia, tu vida toma la forma de
lo que hay dentro tuyo.
Y
por fuera, Dios usa los malos tratos. Dios te ama pero persigue todo lo malo
que haya en ti. “Por causa de ti somos como ovejas que son llevadas al
matadero”, Dios quiere matar algo ahí. Pablo decía “cada día muero”. Dios
quiere ponerle fin al orgullo, a la soberbia, etc. Para que cada día no te parezcas
más a ti mismo si no seas conformado a la imagen de su hijo, para que El sea el
primogénito entre todos los hermanos.
Si
tu estas en este reino no es para que se te vea a ti en este reino sino para
que El se vea a través de ti en este reino.
Cuando
tu entiendes esto, tu vida misma va a ser la biblia que los demás van a leer.
Entonces
cuando seas formado, conformado todas las cosas van a trabajar en tu vida con
un solo fin que ayuden a bien, a bien de que tu vida vaya tomando la forma de
Jesucristo y vaya perdiendo la forma humana carnal.
Cuando
tu estas en este proceso y entiendes que todo lo que te está pasando es porque
Dios quiere cumplir su propósito. Cuando
eres formado por Dios para que tengas la imagen de su hijo Jesucristo, no
necesitas promocionarte, la gente se da cuenta de que en ti hay algo distinto
que es Cristo Jesús viviendo dentro de tu vida.
Cuando
está en el proceso de Dios, busca el reino de Dios y se deja moldear por Dios
para que se cumpla este propósito ahí si se cumple lo que dijo Jesucristo en
Mateo 6 que “si buscas primero el reino de Dios y su justicia, todas las demás
cosas vendrán por añadidura.
Cuando
estés en el proceso, si buscas a Dios de igual manera el Espíritu de Dios te va
a ayudar en tu debilidad.
Romanos 8:26-27 Tu lloras porque
no entiendes lo que te está pasando, pero el Espíritu de Dios intercede pero el
si sabe porque te está pasando lo que te está pasando para que se cumpla el
propósito.
Conclusión
Tu
vida tiene que ir tomando forma del propósito de Dios. ¿Y cuál es el propósito?
Que cada día te parezcas más y más a Cristo Jesús. Que seas conforme a la
imagen del Señor Jesucristo.
Este
es el propósito principal para tu vida y todo lo demás va a ser añadido.
Formar
tu vida, ese es el propósito de Dios.
Pastor Carlos Ibarra
Ministerio Jesús
es el Señor
Año 2015
